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1 misión: proteger la salud de sus empleados

"Perder la audición siempre ha sido una gran preocupación. Con dos años ya sufría continuamente de otitis. Hasta los quince no hubo un solo año en el que no visitara regularmente al otorrinolaringólogo para miringotomías y drenajes transtimpánicos (aireadores transtimpánicos). Me dolían los oídos a menudo y oía mal. Siempre tenía miedo de que mis pérdidas auditivas degeneraran en sordera...

En Francia, más de tres millones de trabajadores expuestos a más de 80 decibelios cuentan con protectores auditivos –generalmente incómodos– que aíslan y que no se usan de forma eficaz: ¡es imposible llevar puestos los protectores contra el ruido habituales durante más de 2 horas diarias! Por consiguiente, cada protección que se compra es ineficaz y, sin embargo, todos creen que lo hacen bien. Por último, las pérdidas auditivas afectan a todas las personas más tarde o más temprano.

En 1992, con 23 años, decidí "cambiar la vida de los profesionales expuestos al ruido para que ningún trabajador se quedara sordo por causa de su trabajo".
A diario, mi principal motivación y mi satisfacción consisten en ayudar a todos los profesionales para que cuenten con la mejor protección que se puedan imaginar.
... ¡Porque proteger su audición es esencial!".